NOTICIA ACTUALIZADA A LAS 12.20 HRS. El Consejo de Administración de la SEPI ha acordado en su reunión de hoy designar a José Antonio Vera como presidente de la Agencia EFE en sustitución de Álex Grijelmo. Hasta ahora Vera era el director de Publicaciones de La Razón. Conoce los deberes que tiene pendiente el nuevo presidente tras ocho años de mandato de Álex Grijelmo.
José Antonio Vera, nuevo presidente de la Agencia EFE, es licenciado en Ciencias de la Información. Hasta ahora ejercía como director de Publicaciones del diario La Razón, además de comentarista habitual de programas de televisión como Espejo Público de Antena 3, 59 segundos de TVE, Madrid Opina de Telemadrid, y en otros canales. En radio, es colaborador habitual de Onda Cero en los programas Herrera en la Onda y La Brújula, y anteriormente de Radio España y de La Mañana de la Cadena COPE. Su trayectoria profesional comenzó en la radio, en Radio Juventud de Málaga y Madrid, para pasar después a Radiocadena Española. En Prensa escrita, trabajó en el diario Sol de España y en ABC. También ha sido director del semanario A Tu Salud.
Este nombramiento es clave en la estrategia de medios de Comunicación públicos que tiene en mente Mariano Rajoy y su equipo. No nada, la agencia pública fue el prer medio al que concedió una entrevista nada más llegar a Moncloa. En el PP también se han planteado la posibilidad de integrar la Agencia EFE en la Coración RTVE, un tema que solo se resolverá tras el nombramiento de los nuevos directivos de TVE.
Junto a este son muchos los retos que se abren para el nuevo responsable de EFE. La mayoría son cabos sueltos dejados su antecesor en el cargo Álex Grijelmo. En este sentido, uno de los preros temas que deberá resolver será el gran proyecto de Grijelmo durante su presidencia de EFE: trasladar la sede de la agencia a Vallecas, tras fallar la compra del edificio de Julián Camarillo en 2009. El traslado definitivo estaba previsto para 2012, pero la mala situación económica lo ha aplazado hasta junio de 2013, cuando finaliza el contrato de arrendamiento de su actual edificio de la calle Espronceda. El nuevo edificio de EFE, todavía en fase de construcción, se alzará sobre un solar propiedad municipal y será adquirido Infovest, empresa de la SEPI.
Después de una brusca caída de los ingresos generada la crisis, Álex Grijelmo trató además de diversificar la actividad de EFE con servicios más propios de una agencia de Comunicación que de una agencia de noticias. El presidente se reunió con directores de comunicación en un desayuno de DIRCOM para ofrecer los servicios de la agencia a las empresas. Por un lado, ofrecía a las compañías aparecer en los medios mediante la cobertura de eventos patrocinados las mismas con piezas audiovisuales en las que, sin necesidad de citar a la marca, la agen de la misma apareciera las suficientes veces como para satisfacer al cliente.
Estas noticias se venderían después a los miles de medios que compran los servicios de EFE en todo el mundo, garantizando así su visibilidad. La segunda posibilidad consistía en vender vídeos institucionales en los que aparecieran los directivos que tiene la empresa repartidos todo el mundo aprovechando la tante red de corresponsales que tiene la agencia.
El mandato de Grijelmo también estuvo marcado su constante enfrentamiento con los sindicatos. La empresa disminuyó sus costes en más de 6 millones de euros en 2011 con respecto a 2008, incluyendo la rebaja salarial del 4% como media (un 8% para los directivos y sueldos más altos) aplicable en 2010 y 2011. Pero esto no consiguió paliar el efecto de la reducción de los ingresos procedentes del Estado, que redujo su contrato con EFE en 2,2 millones en 2010, recorte que se mantuvo en 2011 y al que se añadieron 800.000 euros efecto del incremento del IVA. Esta situación se explica además la brusca caída de los contratos que se ha acelerado desde 2008.
Y es que durante la gestión de Grijelmo, EFE no ha sido inmune a la complicada situación económica. En 2011 registró unas pérdidas de 4,8 millones de euros. Esto multiplica dos sus resultados negativos del año pasado y eleva hasta los 8,7 millones el dinero que ha perdido la agencia desde el año 2009. Del mismo modo, la crisis económica ha empañado una dirección que había logrado que la empresa entrase en beneficios como pocas veces en su historia.
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