La tarde de ayer un grupo de trabajadores de RNE entregaron al registro general de ERTVE una carta firmada 517 empleados con destino a Leopoldo González Echenique y con copia al Consejo de Administración advirtiendo de la errática política de gestión del equipo de Manuel Ventero. La misiva indican que con la misma plantilla, la única explicación a la brutal caída de audiencia es ‘una gestión que le ha arrebatado a RNE las principales señas de identidad que deben caracterizar a una radio pública: independencia y calidad’.
La plantilla de RNE no está contenta con la gestión que se está haciendo de la emisora desde la llegada de Manuel Ventero a la dirección en junio de 2012. En febrero pasado el Consejo de Informativos de RNE elaboraba un demoledor informes. El texto de siete páginas acusaba a la nueva dirección de vulnerar en ‘repetidas ocasiones’ ‘la neutralidad, objetividad e independencia de los profesionales de los servicios informativos y programas’. Le acusan además de ‘presiones directas y censura’.
En este contexto un grupo de 517 trabajadores han firmado una carta –al margen de los sindicatos en la que piden un cambio de gestión alarmados la brutal caída de audiencia experentada en los últos meses. ‘Nos preocupa la velocidad de caída de la audiencia que muestran los últos datos del EGM que tememos convertirnos, en breve, en una radio residual alejada de los oyentes’, indican.
Según la últa oleada del EGM, RNE ha perdido un 31% de su audiencia equivalente a 585.000 oyentes. Del mismo modo, sus programas más emblemáticos también se han desplomado. El día menos pensado’ de Manolo HH se dejó 500.000 oyentes, un 35% y ‘Nunca es tarde’ 150.000, un 50% menos.
En la carta indican además este retroceso solo puede deberse a una ‘gestión equivocada’ ya que la plantilla y las ganas de trabaja son las mismas desde hace años. Indican además que les preocupa ‘el trato de la dirección hacia los trabajadores, la falta de comunicación y transparencia y el hecho de que sus decisiones no se rijan, exclusivamente, criterios profesionales. Esa actitud genera en la plantilla una incertidumbre y una angustia que hacen cada vez más difícil nuestro trabajo diario’, indican.
‘Por todo ello pedos que se tomen las medidas necesarias para que Radio Nacional de España vuelva a ser la radio de todos: oyentes y trabajadores’, concluyen.
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