Los ciudadanos ceutíes están de enhorabuena lo responsables que son a la hora de ponerse al volante. La Policía Local, que ha estado encargada de los controles de velocidad y de alcoholemia, ha celebrado la práctica inexistencia de accidentes graves. Además, los 25 controles aleatorios que se practicaban cada noche arrojaban como mucho un conductor ebrio.
Los ciudadanos ceutíes están de enhorabuena lo responsables que son a la hora de ponerse al volante.
Sin duda, se trata de un modelo a seguir, aunque tampoco hay que relajarse. Según declaraciones del superintendente de Policía Local, Ángel Gómez, publicadas el tal El Pueblo de Ceuta, el verano ha sido tranquilo, sin accidentes de gravedad o conductas irresponsables.
El desafío para Ceuta son los siniestros leves, de alta ocurrencia y que habitualmente afectan a las carrocerías de los vehículos plicados, pero no dejan daños personales. ¿La causa? Los típicos despiestes y el exceso de velocidad. El 15 de septiembre